--El primer encuentro InVIHforum ha reunido a más de 170 profesionales de la enfermería y la comunidad VIH, para abordar cuestiones como la importancia del abordaje de las comorbilidades neuropsiquiátricas y la salud a largo plazo de las personas con VIH--
--Se ha puesto de manifiesto la importancia de una comunicación fluida entre paciente y equipo sanitario para detectar necesidades no cubiertas y mejorar el abordaje de la infección por VIH--
Madrid, lunes 18 de marzo de 2024. – El tratamiento del VIH ha experimentado una importante evolución en las últimas tres décadas, transformándose de una patología mortal a una crónica. Un hecho que ha permitido que las personas con VIH puedan controlar su enfermedad y mejorar su calidad de vida a largo plazo. En este sentido, el envejecimiento saludable ya es una de las preocupaciones de las personas con VIH y uno de los principales puntos abordados en InVIHforum, el primer encuentro de enfermería y comunidad VIH, organizado por Gilead con la colaboración de SEISIDA, el aval de CESIDA y el patrocinio científico de la Asociación RIS.
Durante la jornada celebrada en Madrid, más de 170 expertos sanitarios, enfermería y representantes de organizaciones de pacientes han debatido sobre algunos de los principales retos que deben afrontar los profesionales del área del VIH en su día a día desde la perspectiva clínica y social, como son el adecuado manejo de las comorbilidades neuropsiquiátricas, la salud a largo plazo, el envejecimiento saludable, el chemsex, la fragilidad, los determinantes sociales, el counselling y la innovación. Todo ello con el objetivo de dar respuestas para mejorar el bienestar de las personas con VIH y a los objetivos de ONUSIDA marcados para el año 2030 para acabar con el VIH y alcanzar la mejor salud física y mental posible, más allá de la supresión virológica.
Salud a largo plazo
La lucha contra el VIH sigue avanzando y, gracias a lo conseguido hasta ahora, se ha logrado pasar de una enfermedad potencialmente mortal a una patología crónica y manejable a través de avances en los tratamientos antirretrovirales o el diagnóstico. En este sentido, buena parte de los expertos reunidos en InVIHforum ha subrayado que el control virológico no puede ser el único indicador para medir el éxito de un tratamiento a largo plazo, sino que también deben evaluarse otros parámetros clínicos. Es muy importante reforzar la atención en torno a las comorbilidades, como las neuropsiquiátricas o las enfermedades cardiovasculares.
En este sentido, los datos indican que estas comorbilidades son más frecuentes y se producen antes en las personas con VIH que en la población general. Además, estas comorbilidades son, en buena parte, responsables del proceso de envejecimiento prematuro. Y si tenemos en cuenta que 1 de cada dos personas con VIH son mayores de 50 años, que 8 de cada 10 tendrán al menos una comorbilidad, que 1 de cada 2 estarán polimedicadas y que, por el momento, todas ellas vivirán el resto de su vida con esta infección crónica, parece razonable que se trabaje para prevenir las comorbilidades y tratarlas de forma anticipada para garantizar una buena calidad de vida a futuro.
Muchos de estos problemas no están considerados en las estrategias o directrices de seguimiento del VIH, por lo que durante InVIHforum se ha querido recordar que es importante un abordaje integral del bienestar de las personas con VIH como parte de los cuidados a largo plazo.
Comorbilidades neuropsiquiátricas
Tal como se ha comunicado en la segunda jornada de InVIHforum, la comunicación entre el equipo sanitario y el paciente es clave para detectar posibles síntomas ocultos y que afectan a la calidad de vida de la persona con VIH. En este sentido, la percepción del paciente sobre su enfermedad es, muchas veces, distinta de la que tiene su profesional, ya que, en ocasiones, los profesionales sanitarios suelen subestimar el porcentaje de pacientes con síntomas que disminuyen la calidad de vida -como ansiedad, tristeza y fatiga- en comparación con la percepción real del propio paciente cuando aporta respuestas directas sobre su estado de salud. Por ello, es fundamental insistir en mejorar la comunicación del profesional con el paciente.
Para ello, Gilead está poniendo a disposición de los pacientes, los profesionales sanitarios y de la comunidad VIH herramientas como la web ‘eresvihda’ (https://www.eresvihda.es/), aplicaciones como “Prepara tu próxima consulta”, o canales como Unfollow de Virus, que pueden ayudar a planificar la consulta con el especialista de forma anticipada, así como transmitir a sus médicos los problemas que realmente tienen relacionados con el insomnio, la ansiedad, el sueño, la depresión o la adherencia para un mejor manejo de estas comorbilidades.
Workshops e innovación
Prevenir, diagnosticar y manejar aspectos como el chemsex y su correlación con la salud mental o la adherencia son algunos de los aspectos debatidos durante la reunión InVIHforum debido a que son temas clave en el entorno del VIH en la actualidad. A ello hay que sumar el análisis de la fragilidad versus envejecimiento o los determinantes sociales y cómo afectan a los diferentes colectivos como migrantes, mujeres, personas mayores, etc.; así como la innovación para fomentar el desarrollo de proyectos disruptivos que ofrezcan soluciones a los retos sanitarios actuales, impulsando el propósito de generar un cambio positivo e impactar en la mejora de la sociedad y en la salud de las personas con VIH.
