- Profesionales de los Servicios de Dermatología y Farmacia Hospitalaria de Castilla-La Mancha se reúnen para establecer sinergias que les permitan ofrecer un mejor abordaje y tratamiento a los pacientes con psoriasis
- El momento actual, con la incorporación de fármacos innovadores, permite que tanto dermatólogos como farmacéuticos hospitalarios sean exigentes con los objetivos de tratamiento en psoriasis con el fin de ayudar a mejorar la calidad de vida de sus pacientes
- La psoriasis es una enfermedad crónica de la piel que afecta a alrededor de 61.000 personas en Castilla- La Mancha (3% de la población), de los que entre el 21% y 30% considera que su vida se ve impactada por su psoriasis.
El trabajo multidisciplinar continuo entre los servicios de Dermatología y Farmacia Hospitalaria es clave para llegar a un mejor abordaje en el tratamiento de los pacientes con psoriasis.
Esta es la principal conclusión que se deriva del encuentro que han mantenido dermatólogos y farmacéuticos hospitalarios de Castilla-La Mancha, en el que han debatido sobre la implementación del trabajo colaborativo de ambas especialidades en el manejo de la psoriasis.
La psoriasis es una enfermedad crónica de la piel que en Castilla-La Mancha afecta al 3% de la población, lo que supone alrededor de 61.000 personas. Según los datos de una reciente encuesta llevada a cabo por Acción Psoriasis, entre un 21-30% de los castellanomanchegos que sufre psoriasis consideran que la psoriasis impacta en su vida diaria. El aspecto físico (reflejado por el 30,3% de los encuestados) y el aspecto emocional (por el 27,2%) son resaltados como las dos esferas de mayor impacto en su día a día como consecuencia de su psoriasis.
Con el fin de optimizar las vías de colaboración conjunta en ambas especialidades, se han puesto en marcha este tipo de reuniones organizadas por la compañía biofarmacéutica AbbVie. “La psoriasis es una enfermedad crónica con impacto más allá de la piel y que requiere de un abordaje multidisciplinar; la coordinación de criterios clínicos y de eficiencia es necesaria para dar respuestas específicas a cada paciente”, explica la Dra. Piedad López Sánchez, del Servicio de Farmacia Hospitalaria del Hospital de Tomelloso, Ciudad Real. “Hoy es clave la existencia de un trabajo coordinado que favorezca una relación mutua entre Dermatología y Farmacia Hospitalaria. Estas reuniones nos ayudan a ello y sobre todo a trabajar de forma colaborativa por un beneficio directo en la calidad de vida de los pacientes”.
En este sentido, Luis Nudelman, director médico de AbbVie en España, destaca que “en el ADN de nuestra compañía siempre ha estado apoyar la formación de los profesionales sanitarios. Con estas reuniones ofrecemos a los dermatólogos y farmacéuticos un espacio de encuentro y trabajo conjunto que sirva para ofrecer las mejores soluciones al paciente”.
Uno de los objetivos que debe perseguir este trabajo colaborativo es la contribución conjunta a la medición de resultados en salud y la sostenibilidad del sistema. “Desde ambas funciones, dermatólogos y farmacéuticos, trabajamos juntamente con diferentes estrategias que nos permiten mejorar sinérgicamente el impacto en el paciente y la medición de los resultados en salud”, explica la Dra. López Sánchez. “En el caso de los farmacéuticos resaltan las tareas de telefarmacia, realizando consultas de atención farmacéutica por teléfono y/o videollamadas, y llevando la medicación a casa en pacientes concretos, tareas formativas de fármacos biológicos y estrategias de optimización de la adherencia, que trabajamos de forma colaborativa con la consulta del dermatólogo”.
En la situación actual que atravesamos a causa de la COVID-19 el trabajo coordinado entre ambos servicios es hoy más importante que nunca para garantizar la calidad asistencial de los pacientes con psoriasis. “Desde AbbVie apoyamos programas que trabajen por la mejora de los estándares de cuidado de los pacientes con psoriasis. Este apoyo colaborativo junto con nuestro compromiso con la innovación permitirá ofrecer a los profesionales alternativas con las que alcanzar objetivos terapéuticos que den solución a las necesidades de los pacientes y que contribuyan a mejorar el abordaje de la enfermedad especialmente en los tiempos que vivimos”, concluye Luis Nudelman.
