Javier Salas y Belén Remacha presentan sus respectivos boletines de actualidad publicados en El País y ElDiario.es durante el encuentro ‘Ciencia en Redes 2021’, organizado por la Asociación Española de Comunicación Científica (AECC), en colaboración con CaixaForum Madrid.
Los SMS, el teletexto, los teletipos... En función de la edad del periodista, le sonarán más o menos estas palabras e, incluso, las habrá utilizado. En el periodismo reciente también ha resurgido la figura de la newsletter, como han explicado Javier Salas, responsable de “Materia”, de El País, y Belén Remacha, autora de “La newsletter del coronavirus”, de ElDiario.es. Ambos han intervenido en el encuentro ‘Ciencia en Redes 2021’, organizado por la Asociación Española de Comunicación Científica (AECC), en colaboración con CaixaForum Madrid.
“El periodismo ha cambiado mucho”, ha dicho Javier Salas. “No solo hacemos las noticias, sino que también tenemos que hacer de voceros de nuestro propio trabajo”.
“También somos un poco como Brad Pitt”, ha bromeado. “Forma parte de nuestro trabajo promocionar nuestro trabajo y ‘vender’ la información que hemos realizado. En este contexto es cuando surge la idea de los boletines, las newsletters, etc.”.
Por un lado, se trata de “vender la moto”, y, por otro, de “pescar lectores que paguen por leer periódicos”, ha dicho de forma muy coloquial.
Claves para que un boletín funcione
Javier Salas ha enumerado una serie de “claves para que un boletín funcione”:
1. Títulos y textos cortos: la mayoría de la gente va a leer la información en el móvil.
2. Pequeños cebos: son una herramienta para que el posible lector abra el correo electrónico. Pueden ser guiños musicales, por ejemplo, o menciones a la Hemeroteca de El País.
3. Gabinete Maravillas: son informaciones curiosas y entretenidas para el lector.
La respuesta de los lectores
El boletín “Materia” tiene 80.000 personas apuntadas, de las que cerca de un 35% abre la newsletter. “A mí me parece poco, pero, por lo visto, está muy bien”, ha comentado Javier Salas. “El feedback que recibimos es muy bueno; todos los fines de semana nos llegan mensajes de gente que se cabrea conmigo por utilizar la palabra newsletter”. También se aprovechan los mensajes de los lectores para realizar una especie de fe de errores, aparte de valorar las quejas recibidas.
La newsletter del coronavirus
El boletín de ElDiario.es “La newsletter del coronavirus” aborda cada sábado la crisis actual desde una perspectiva sanitaria, científica, política, etc. “Intenta abarcar un poco todos los ámbitos”, ha dicho Belén Remacha, actual responsable de este proyecto de la sección de Sociedad. En la actualidad están suscritas unas 16.000 personas, y la tasa de apertura ronda el 36-40%. Forma parte de una red de newsletters de ElDiario.es, con diferentes temáticas y distintas periodicidades.
El 11 de marzo de 2020 se envía la primera carta de “La newsletter del coronavirus”. “En ese momento había una avalancha de información, en muchos casos contradictoria”, ha recordado Belén Remacha.
El “espíritu de la newsletter no ha cambiado desde el principio”, ha manifestado, aunque sí se han modificado otras cuestiones, como el día de publicación. “Nuestro objetivo es informar a la gente de lo que debe saber hoy respecto al coronavirus. Ahora tenemos más tiempo para profundizar en las cuestiones de actualidad, como la segunda dosis de AstraZeneca, por ejemplo, o la liberación de las patentes”.
Secciones de “La newsletter del coronavirus”
1. Tema central: aborda con más profundidad alguna de las informaciones más destacadas de la semana. En la actualidad hablamos sobre todo de los avances en la vacunación.
2. En positivo: al principio era un bloque fijo, pero en ocasiones era muy difícil encontrar buenas noticias. Ahora esta sección no tiene sentido, porque ya siempre tenemos buenas noticias.
3. Internacional: es una sección que también ha evolucionado y va desapareciendo, porque todos los temas se mezclan, como las variantes de la Covid-19, etc.
“Al principio intentaba incluir en la newsletter toda la información que habíamos publicado, pero ahora ya no tenemos compartimentos estancos; por tanto, le doy más importancia al hilo narrativo. En definitiva, se trata de una carta que queremos que la gente lea hasta el final”.
