- A los 5 años, el 67% de los pacientes seguía sin progresión, con una supervivencia global del 96% entre todos los pacientes tratados.
Johnson & Johnson ha hecho públicos resultados actualizados del estudio fase 2 CAPTIVATE en el que se evalúa el tratamiento de duración fija con IMBRUVICA® (ibrutinib) en combinación con venetoclax (I+V) en pacientes con leucemia linfocítica crónica (LLC) no tratados anteriormente. Tras un seguimiento de 5,5 años, el régimen de duración fija sigue demostrando una supervivencia libre de progresión (SLP) clínicamente significativa, tanto en la población general como en aquellos pacientes con características genómicas de alto riesgo. Los datos se dieron a conocer en una comunicación oral (Abstract #7009) en el Congreso Anual de 2024 de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inglés) que se celebró en Chicago del 31 de mayo al 4 de junio y también en el Congreso Anual de 2024 de la Asociación Europea de Hematología (EHA, por sus siglas en inglés) (Póster #P675) que se ha celebrado en Madrid del 13 al 16 de junio de 2024.
“Después de más de cinco años, los resultados del estudio CAPTIVATE confirman el beneficio mantenido de la combinación de ibrutinib y venetoclax como tratamiento de primera línea en pacientes con LLC, incluidos aquellos con características genómicas de mayor riesgo”, ha señalado el Dr. Paolo Ghia, de la Università Vita-Salute San Raffaele y el IRCCS Ospedale San Raffaele de Milán (Italia) e investigador del estudio.‡ “Este régimen de duración fija, completamente oral y sin quimioterapia ofrece a los pacientes candidatos la ventaja de un intervalo más amplio sin tratamiento, al tiempo que mantiene el control de la enfermedad”.
Los últimos resultados del estudio multicéntrico fase 2 CAPTIVATE mostraron que tras una mediana de seguimiento de 61,2 meses, el 67% (intervalo de confianza [IC] del 95%: 59-74) de los 159 pacientes tratados con la combinación de I+V de duración fija seguía sin progresión y con vida a los 5 años.1 Cabe destacar que la mediana de la SLP no se alcanzó tras 5,5 años de seguimiento, lo que indica un control mantenido de la enfermedad. La tasa de supervivencia global (SG) a 5 años fue del 96% para todos los pacientes tratados, mientras que aquellos con características genómicas de alto riesgo (del(17p)/TP53 mutado o cariotipo complejo) alcanzaron una tasa de SG del 90% (IC del 95%: 77-96), en comparación con el 100% alcanzado entre los que no tienen estas características. Además, para los pacientes que alcanzaron la enfermedad mínima residual indetectable (EMRi) en la sangre y la médula ósea, esto se asoció con mejores resultados. Los pacientes con EMRi en la médula ósea a los 3 meses del final del tratamiento (FdT + 3 meses) tuvieron una tasa de SLP a 5 años del 84% (IC del 95%: 73-90) comparada con el 50% (IC del 95%: 36-62) de los que no alcanzaron una EMRi en la médula ósea 3 meses después del final del tratamiento.
En los pacientes que sufrieron una recaída después del tratamiento con I+V, el tratamiento posterior con regímenes basados en ibrutinib demostró alcanzar respuestas duraderas con un perfil de seguridad aceptable, incluso en pacientes con características genómicas de alto riesgo. De los 61 pacientes con progresión de la enfermedad después del final del tratamiento con I+V, 32 pacientes iniciaron tratamiento posterior con ibrutinib en monoterapia (n=25) o duración fija de I+V (n=7). Con una mediana de 21,9 meses de tratamiento con ibrutinib en monoterapia, el 86% de los pacientes alcanzó una respuesta parcial o mejor. Con una mediana de 13,8 meses de retratamiento con la combinación de I+V, la tasa de respuesta global (TRG) fue del 71%.
Durante el seguimiento más prolongado, se produjeron 18 neoplasias secundarias en 13 pacientes y, en general, no se observaron nuevas señales de seguridad para el tratamiento de duración fija con I+V desde el análisis anterior. Los acontecimientos adversos (AA) durante el tratamiento posterior fueron consistentes con los perfiles de seguridad conocidos de ibrutinib en monoterapia y de I+V. Los AA más frecuentes durante el retratamiento con regímenes basados en ibrutinib, que se dieron en ≥10% de los pacientes con ibrutinib en monoterapia o en ≥2 pacientes tratados con I+V, incluyeron diarrea, hipertensión, pirexia, infección del tracto respiratorio superior y náuseas, con AA graves notificados en cinco pacientes.
Resultados de la extrapolación de la curva del tiempo hasta el siguiente tratamiento del estudio fase 3 GLOW a 6 años
Los datos publicados más recientemente sobre las pruebas a largo plazo relativas a la duración del efecto terapéutico asociado al tratamiento con I+V en pacientes con LLC no tratados previamente incluyen 57 meses de seguimiento. Se realizó una extrapolación más allá de los datos disponibles del tiempo hasta el siguiente tratamiento (TTNT) para estimar el número de pacientes que no habrían recibido un tratamiento posterior después de seis años, con resultados presentados en un póster en el Congreso Europeo de Hematología (EHA) (Póster #P699). La extrapolación indica que, a los seis años, es poco probable que aproximadamente el 87% de los pacientes tratados con la combinación I+V requiera un tratamiento de segunda línea.2 Estos resultados sugieren la posibilidad de un largo período sin tratamiento para estos pacientes con LLC, tratados con I+V en el contexto de la primera línea.
“Ibrutinib es un inhibidor de la tirosina quinasa de Bruton disponible como tratamiento tanto de duración fija como continuo para la leucemia linfocítica crónica, un fármaco ampliamente estudiado de su clase”, ha señalado el doctor Edmond Chan, director senior para Europa, Oriente Medio y África del área terapéutica de Hematología de Johnson & Johnson Innovative Medicine. “Los últimos datos presentados en EHA refuerzan nuestro compromiso para seguir ofreciendo a los pacientes tratamientos innovadores, como ibrutinib, que pueden adaptarse a las necesidades y preferencias cambiantes de los pacientes”.
“En Johnson & Johnson, nuestro objetivo primordial es lograr erradicar el cáncer de la sangre, y nos inspira cómo siguen influyendo en los resultados de los pacientes los regímenes basados en ibrutinib”, ha señalado el Dr. Mark Wildgust, vicepresidente de Asuntos Médicos Globales y Oncología de Johnson & Johnson Innovative Medicine. “Casi 300.000 pacientes en todo el mundo han sido tratados con ibrutinib, y los últimos hallazgos demuestran que los pacientes con LLC alcanzan respuestas profundas y duraderas que se traducen en largos periodos sin tratamiento, con el régimen de duración fija”.