El uso de las impresoras 3D está apuntado muy alto, sobretodo en el ámbito médico. Se está desarrollando con tanta fuerza, que el Instituto de Biomecánica de Valencia, ya ha puesto en marcha junto con el Instituto Tecnológico AIDIMME, una cadena de producción de productos adaptados y personalizados según el paciente.
Estudian profundamente el cuerpo humano en 3D, junto con el diseño personalizado de productos que pueden fabricarse con las impresoras 3D. Un elemento de tecnológica de fabricación rápida que está cogiendo muchísima fuerza, tanto en el ámbito personal como en el médico.
“Hoy en día la personalización es una alternativa muy atractiva para el diseño de productos, ya que te aseguras de que el tipo de producto encajará a la perfección con el gusto del usuario”, así lo explica Juan Carlos González, director del IBV. También añade que para que estos productos sean asumidos por el mercado, no deben ofertarse con un sobreprecio o un plazo de entrega muy grande, ya que de ser así, no tendría éxito.
De IBV y AIDIMME, ha nacido la idea del proyecto Custom on Body, en el que, a día de hoy, tratan de desarrollar una metodología de diseño que partiendo de avatares del cuerpo humano, permita diseñar productos personalizados adaptados a las preferencias y a la morfología del usuario o consumidor. Un proyecto financiado gracias al programa del IVACE de ayudas a Institutos Tecnológicos, que está cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), en un porcentaje del 50% a través del programa FEDER de Valencia.
Para hacer la demostración, han escogido productos que se pueden personalizar sin problema, mediante el uso de datos morfológicos y gustos del consumidor. Dado que uno de los mejores productos para trabajar con esta idea es el zapato, han optado para trabajar en el sector del calzado. Apuestan por este ámbito, ya que creen que se puede mejorar notablemente el confort y la funcionalidad del zapato. Una idea confirmada por Roger, gerente de Grandes Zapatos, una empresa especializada en el calzado especial con más de 10 años de experiencia en el sector que cree que la personalización y adaptación, es el futuro de productos como estos.
También han optado por estudiar la posibilidad de crear plantillas ortopédicas por impresión 3D a medida, para cada zapato de cada paciente favoreciendo la fusión del escaneo y la medida del zapato con la orografía del pie del paciente. De este modo, se diseñan plantillas a medida para usarse como tratamiento.
Para desarrollar con rapidez y eficiencia el proyecto, se centran por un lado, en los requisitos y criterios del diseño y por otro lado, añaden un procedimiento para optimizar estos diseños usando herramientas informáticas muy específicas que mejoran las prestaciones mecánicas y consiguen ahorros en el material de fabricación.
Hasta ahora, vemos que este tipo de tecnología, está cada vez más disponible en elementos de uso común, llegando al objetivo de personalizar los productos a sus gustos. Se trata de contemplar la idea de usar un poco la imaginación y la impresión digital hace la resta. Una barra libre de personalización y flexibilidad que permitirá fabricar cualquier elemento, des de elementos de decoración para el hogar hasta cualquier elemento del sector médico u ortopédico.
Así lo afirman y apoyan los ganadores del South Summit, los cuales presentaron el pasado 22 de diciembre, un proyecto en el que se encontraban los elementos que tenían más facilidades de aplicación de impresión 3D. Estos elementos daban lugar a las plantillas ortopédicas, sujetadores adaptados a cicatrices de cirugía y elementos del sector odontológico.
A modo de conclusión, la medicina y la impresión 3D, mantienen una estrecha relación con el objetivo de aumentar la confianza del paciente en el caso del sector médico e incrementar la satisfacción gracias a la personalización del producto según los gustos de cada usuario.