Catalònia Fundació Creactiva y SYNLAB han iniciado un estudio clínico orientado a la mejora de la calidad de vida de las personas con trastornos de neurodesarrollo, basado en la caracterización genética de los pacientes y el análisis de su microbiota intestinal. Los resultados pueden cambiar el paradigma de la atención médica a este tipo de pacientes, implementando unas pautas de alimentación que, en muchos casos, pueden ser alternativas a los tratamientos farmacológicos, que son más agresivos y siempre tienen efectos secundarios.
Los 100 pacientes que participarán en el estudio están adscritos al centro Catalònia Fundació Creactiva de Cerdanyola del Vallés, en Barcelona. Las pruebas incluyen el análisis de la microbiota intestinal (microbiota) y un estudio genómico nutricional. A partir de sus resultados, se definirán pautas alimentarias y suplementarias personalizas, y se realizará un seguimiento de los resultados y su evaluación, en un plazo de entre 4 y 6 meses.
El estudio se realizará en las próximas semanas en 100 adultos con problemas conductuales asociados y permitirá desarrollar una estrategia interdisciplinar que, a partir unas pautas nutricionales y suplementarias personalizadas, mejore la calidad de vida de estas personas y su comportamiento, reduciendo o eliminando los problemas derivados de la alteración intestinal relacionada a menudo con trastornos del comportamiento en personas con Discapacidad Intelectual (DI).
“El objetivo –explica el Dr. Luis Izquierdo, Director de Genética Médica de SYNLAB- es alcanzar mejoras en la calidad de vida de estas personas, pacientes que, a menudo, tienen una capacidad para comunicarse limitada, que no saben identificar ni pueden transmitir si les sienta mal un medicamento o un alimento, lo que puede derivar en alteraciones de la conducta”.
La disbiosis intestinal -desequilibrio de la microbiota intestinal-, es muy frecuente en este tipo de pacientes y puede estar provocada por el efecto de ciertos medicamentos (antibióticos), el estrés, malas digestiones, así como el exceso de proteínas y azúcares simples en la dieta o de las alteraciones bucodentales que condicionan la digestión. Los sobrecrecimientos o disminución de las bacterias intestinales pueden contribuir al desarrollo o empeoramiento de muchos trastornos o enfermedades crónicas y degenerativas intestinales, desde hinchazón abdominal y estreñimiento crónico hasta la enfermedad inflamatoria intestinal (síndrome de colon irritable) e incluso migrañas y enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide.
Por su parte, el test genético permitirá identificar intolerancias alimentarias y mecanismos de funcionamiento metabólico del organismo para definir la dieta más adecuada y, en su caso, qué tipo de suplemento y en qué dosis hay que suministrar.
“El proyecto –señala el Dr. Joaquim Serrahima Director General de Catalonia Fundació Creactiva - nos va a permitir, además, reorientar el tratamiento y la atención a muchos de los pacientes y, por tanto, mejorar su calidad de vida y cuidado, que es nuestro principal objetivo”.
La discapacidad intelectual -sindrómica y/o ambiental- afecta al 8,5% de la población y suele tratarse desde dos perspectivas: la psiquiátrica, que utiliza psicofármacos y farmacoterapia en general, y la atención psicopedagógica, que actúa principalmente a nivel conductual, reeducación y estimulación. La primera sigue un protocolo unificado, que se aplicaría para todos los casos por igual, sin personalizarlos. La segunda trabaja desde una perspectiva más individualizada, pero con la carencia de no controlar los aspectos biológicos. Se trabaja sobre la consecuencia, pero no se puede abarcar el origen o mejorar la base.
Independientemente del diagnóstico, muchas personas con la misma patología tienen diferente sintomatología y el objetivo del proyecto es saber y ayudar a minimizar el impacto de esta situación en su vida cotidiana.
Según el Dr. Izquierdo, “la prevalencia de los llamados trastornos de conducta está aumentando de una manera muy notable y preocupante, no solo en el campo de la discapacidad, sino también en la población general. Se ha demostrado que existe una relación directa entre el intestino y el cerebro. Si tenemos en cuenta que en el intestino hay más neuronas que en la medula espinal, la misma cantidad de neurotransmisores que en el cerebro y se sintetiza el 95% de la serotonina, y el 50% de la dopamina del organismo, sobra decir, que hay una implicación directa entre la disbiosis o permeabilidad intestinal, y los problemas conductuales”.
Estudio pionero
El estudio hará hincapié en la modificación de conducta de estos pacientes, así como en la mejora de las funciones básicas como son la memoria y la atención, entre otras, tratándoles desde una perspectiva biológica, reequilibrando su organismo, aumentando su bienestar físico y neurobioquímico, lo que impactará en su comportamiento y calidad de vida.
Se trata de un proyecto pionero en este campo y contribuirá al tratamiento de las personas con trastornos en el neurodesarrollo desde una perspectiva interdisciplinar, que contribuirá a un cambio de paradigma en la atención de estas personas, tratándolas desde la biología y el funcionamiento del organismo, reduciendo su malestar asociado a varias patologías y aumentando su potencial de respuesta.
El equipo está formado por el Dr. Luis Izquierdo (Médico Genetista), la Dra. Irene Santacruz, (nutricionista experta en microbiota intestinal), la Dra. María Jesús López-Salcedo (Farmacéutica especialista en microbiota Intestinal) y la Dra. Mª Dolores de la Puerta (Médico especialista en microbiota intestinal), además del equipo médico y psicopedagógico de la fundación. Su desarrollo contará la colaboración del laboratorio Cobas y Enervit Science in Nutrition