Desvela el perfil de los pacientes españoles con DM1, describe el manejo actual de la enfermedad y evalúa los factores que pueden influir en su control óptimo
Un estudio de la SED aclara la situación de la diabetes tipo 1 en España
- Aumenta en España el empleo de recursos tecnológicos, como la monitorización continua de glucosa o la terapia de infusión subcutánea continua de insulina
- Se constata que una adecuada educación diabetológica y un tratamiento avanzado mejoran el control de la enfermedad
- Un elevado porcentaje de personas con diabetes tipo 1 presentan sobrepeso u obesidad
- Se calcula que unas 90.000 personas en España tienen una diabetes tipo 1
Sevilla, 25 abril 2019. El uso de tecnologías para el manejo de la diabetes tipo 1 (DM1), como la monitorización continua de glucosa (MCG) o la terapia de infusión subcutánea continua de insulina (ISCI), ha crecido considerablemente en España en los últimos años. “Esto tiene importantes consecuencias positivas, ya que la aplicación de estas tecnologías no sólo mejora el control glucémico y, por tanto, reduce la aparición de complicaciones crónicas, sino que también mejora la calidad de vida de las personas con DM1 y de sus familias”, afirma el Dr. Fernando Gómez Peralta, quien considera prioritario “avanzar en la financiación de esos sistemas por parte de nuestro sistema de salud”.
Esta es una de las principales conclusiones que se extraen del estudio SED1, impulsado por la Sociedad Española de Diabetes (SED) y presentado hoy en el transcurso del XXX Congreso Nacional que está celebrando esta sociedad científica en Sevilla.
Un estudio necesario
La diabetes tipo 1 supone aproximadamente 1 de cada 10 casos de diabetes en España (afecta al 10% de la población diabética), estimándose una prevalencia en la población general del 0,2% (unas 90.000 personas). Se trata, además, de un tipo de diabetes con necesidades de tratamiento específicas y complejas. Sin embargo, son escasos los datos epidemiológicos y de manejo real de esta enfermedad en nuestro país, limitándose a algunas iniciativas locales o autonómicas y que se circunscriben a población adulta o pediátrica. Gran parte de estas limitaciones se superan con el estudio SED1, que incluye datos de todas las comunidades autónomas y tanto de pacientes y centros pediátricos como de adultos.
Como explica el Dr. Gómez Peralta, coordinador del estudio, “el objetivo era conocer el perfil de los pacientes españoles con DM1, describir el manejo actual de la enfermedad y evaluar los factores que pueden influir en su control óptimo; sin duda, se ha hecho una foto muy detallada y representativa de la situación actual de las personas con DM1 en toda España”. A su juicio, “disponer de estudios epidemiológicos sobre el perfil de pacientes con DM1 permite conocer la realidad de su situación: uso de terapias avanzadas, factores relacionados con el control de la enfermedad y áreas de mejora”. Es más, asegura este experto, “esperamos que los datos obtenidos nos ayuden a detectar áreas de mejora en el manejo de la diabetes: las personas con DM1 deberían utilizar terapias insulínicas avanzadas, tecnologías de monitorización continua de glucosa, apoyo educativo y psicológico,... y los profesionales más directamente implicados precisan medios y tiempo para ello”.
Principales observaciones
Así, se ha podido concluir que existe una proporción importante de pacientes DM1 que presentan sobrepeso u obesidad (hasta un 40%) y que algunos factores relacionados con una adecuada educación diabetológica y un tratamiento avanzado, como la frecuencia de monitorización de glucosa y el uso del ratio insulina/carbohidratos (ICR), mejoran la eficacia del tratamiento. Además, como resalta el Dr. Gómez Peralta, “se confirma que el uso de tecnologías para el tratamiento es superior al publicado en estudios previos, confirmando una tendencia creciente similar a la observada en otros países occidentales”.
SED1 es un estudio observacional, multicéntrico, transversal con recogida de datos retrospectiva y no intervencionista, calculándose una muestra representativa a nivel nacional. En total, se han incluido de forma consecutiva un total de 647 personas con DM1 (62 pacientes pediátricos y 585 adultos).
Como primer hallazgo de interés, se ha determinado que la edad media en el momento del diagnóstico de DM1 es de 4,9 años en la población pediátrica y de 19,3 años en adultos. Un 48,7% de la población de estudio presenta comorbilidades, principalmente dislipidemia (25,8%), retinopatía (19,3%) y nefropatía (5,9%).
Respecto al tratamiento con insulina, el estudio revela que un 75% de la población global estaba en un régimen de tratamiento insulínico basal-bolo y un 20 % con bomba de insulina. El 67% de la población evaluada usó dosis correctoras de insulina y un 51% emplearon una ratio insulina/carbohidratos (ICR). Un 81% de los pacientes tenían un plan de alimentación recomendado por su médico y a un 66% se le reconoce una buena adherencia a la dieta. Los pacientes se realizaron una media de 3,0 mediciones de glucosa capilar/día y un 25% de los pacientes usaba algún tipo de monitorización continua de glucosa (MCG).
Estas observaciones resultan de especial interés sobre todo si se tiene en cuenta, como ha demostrado este estudio, que un mayor número de mediciones de glucosa y el uso de la ICR se asocia con menores valores de hemoglobina glicosilada (HbA1c), mientras que una mayor duración de la enfermedad y la falta de adherencia a la dieta aumentaban la HbA1c. Como recuerda el Dr. Gómez Peralta, que ejerce en la Unidad de Endocrinología y Nutrición del Hospital General de Segovia, “el control glucémico es un objetivo fundamental del tratamiento de la DM1, siendo la HbA1c el indicador más reconocido del control metabólico. En nuestro estudio sólo una tercera parte de los pacientes tienen una HbA1c inferior a 7%”.
Según las recomendaciones de la American Diabetes Association (ADA), el objetivo general de HbA1c es 7%; en este estudio se determina que el valor de la HbA1c del año anterior en la población evaluada fue de 7,6%. Tal y como destaca el Dr. Gómez Peralta, “factores como la edad, la motivación, el cumplimiento, la educación terapéutica y las habilidades de manejo de la enfermedad, así como el miedo a los episodios de hipoglucemia, podrían influir en el control glucémico continuado”.
Partiendo de los resultados de este estudio, que se ha realizado gracias a una ayuda no condicionada de Sanofi Diabetes, la SED insiste en su reivindicación de contar con equipos integrados en Unidades de Diabetes de cada hospital (médicos endocrinólogos de adultos y pediátricos, educadores, psicólogos clínicos,...) que puedan ofrecer tiempo y medios a las personas con DM1 en consultas monográficas y con acceso a contacto por medios no exclusivamente físicos (telemedicina,...). Y es que, como subraya el Dr. Gómez Peralta, “las personas con DM1 tienen necesidades que exceden en muchos casos a las posibilidades de una consulta ordinaria en el hospital”, quien considera que “también sería necesario que estos medios se extendiesen de forma similar a todas las áreas geográficas”.
Formación en nuevas tecnologías
Atendiendo a los hallazgos de este estudio, y a la emergente generalización del uso de nuevas tecnologías para la monitorización de la glucosa en personas con diabetes, se ha considerado fundamental desde la Sociedad Española de Diabetes promover iniciativas de formación en este ámbito. Fruto de ello es la celebración de un curso postcongreso, que tendrá lugar este sábado y que ha sido organizado por el Grupo Tecnologías Aplicadas a la Diabetes de la SED.
Como resalta la Dra. Eva Aguilera, responsable de este grupo de trabajo, “se efectuará una actualización de los diferentes sistemas de monitorización continua a tiempo real (MCG-TR) (incluyendo los implantables) e intermitente (Flash), así como una revisión de las novedades y profundizando en la interpretación clínica de los datos (especialmente las flechas de tendencia) para poder obtener así un mayor beneficio clínico”. Igualmente, se hablará de los sistemas integrados bomba-MCG, así como de los sistemas de asa cerrada híbrida que ahora comienzan a implantarse en nuestro país y que “permiten automatizar y personalizar la administración de insulina basal las 24 horas del día”, apunta la Dra. Aguilera, que trabaja en el Servicio Endocrinología y Nutrición del Hospital Germans Trias i Pujol (Barcelona).
Además, este encuentro servirá para abordar de forma práctica cómo actuar y ajustar la terapia con bomba frente a diferentes situaciones (deporte, gestación, enfermedades intercurrentes, periodo vacacional). Por último, se formará a los asistentes sobre las diferentes aplicaciones que permiten tanto a los profesionales sanitarios como a los familiares acceder de forma remota a los datos de monitorización de glucemia de la persona con diabetes, evaluándose las diferentes aplicaciones y softwares disponibles; y también se hablará de iniciativas promovidas por personas con diabetes, como ‘Nightscout’.
Para más información:
Paco Romero
639 64 55 70; Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.; https://sedsevilla2019.com