- Estas Navidades nos volveremos a juntar familiares y amigos, pero hay que tener presente que sigue siendo imprescindible llevar una alimentación saludable y evitar los excesos
- El Dr. Jesús Román Martínez, presidente del Comité Científico de SEDCA, nos ayuda con varias pautas para no excedernos durante las comidas
- Es recomendable seguir un patrón de Dieta Mediterránea, pudiendo incluir un consumo moderado de bebidas fermentadas como la cerveza y con opciones SIN
Madrid, 21 de diciembre de 2021. La navidad es una fecha señalada en la que, erróneamente, solemos permitirnos cometer algunos excesos en cuanto a alimentación se refiere: descuidamos la dieta, hacemos una mayor ingesta de alimentos y relegamos al año entrante nuestros próximos objetivos, nuestra buena alimentación y, en definitiva, nuestra salud. El hecho de contar con numerosas reuniones sociales es motivo de que, por ejemplo, según la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), se estima que podemos llegar a conseguir aumentar hasta 5 kilos durante esta etapa[1].
Los desajustes en la alimentación pueden derivar en problemas mayores si no nos cuidamos, además de ser responsable de la aparición de múltiples afecciones en nuestra salud[2]: glucosa alta, presión arterial, ataques cardíacos, problemas óseos y articulares, apneas o problemas en el hígado son algunos de los impactos que puede acarrear una mala alimentación.
Teniendo en cuenta este contexto, es importante seguir las pautas de los expertos para cuidarnos durante estas fechas. En este sentido, el Dr. Jesús Román Martínez, presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Ciencias de la Alimentación (SEDCA) y de la Fundación Alimentación Saludable, destaca que “en este tipo de celebraciones, y con más razón, las del presente año, en la que volveremos a presenciar grandes reuniones con familiares y amigos, debemos mantener el estilo de vida y dieta saludable que nos marca la Dieta Mediterránea, elaborando menús equilibrados y complementarios, ya que ello nos reportará gran cantidad de beneficios para nuestra salud”. Como recomendación principal durante estas fiestas, el profesor Martínez aconseja evitar la acumulación de comidas excesivas durante varios días, e ir alternando algunas comidas y cenas con opciones más saludables como platos de verdura, ingesta de frutas e incluso infusiones que eviten el empacho.
Entretanto, un elemento clave, que forma parte de la Dieta Mediterránea, de las celebraciones navideñas y por extensión de nuestra cultura, es el consumo de bebidas fermentadas como la cerveza[3], la cual se ha observado de manera interesante en múltiples ocasiones desde la evidencia científica ya que es capaz de aportar beneficios en el sistema inmune[4], como silicio[5], ácido fólico[6] y antioxidantes[7] . Este patrón se da siempre que se consuma de manera moderada[8] y por adultos sanos. Además, el consumo de bebidas fermentadas ha de estar acompañado siempre de alimentos, de manera social y absteniéndose o consumiendo la opción SIN que está especialmente indicada a situaciones que deben excluir el consumo del alcohol, como cuando se deba conducir, cuando se esté bajo tratamiento médico, cuando se trate de mujeres embarazadas y lactantes.
Bajo este precepto, el profesor Martínez afirma que “no sólo el consumo alimenticio forma parte de la Dieta Mediterránea, sino que la hidratación tiene un papel fundamental’. En este sentido, cabe destacar que la bebida que debe primar en nuestra dieta es el agua, sin embargo, en estas fechas, cabe la posibilidad de optar en ocasiones por bebidas fermentadas debido a varios motivos: el aporte calórico total de un vaso de 200 ml (una caña) de cerveza aporta tan sólo 88 kcal, aun así, no podemos olvidar que el consumo moderado es de 200 ml de cerveza en el caso de las mujeres (una caña) y de 400 ml de cerveza en varones (dos cañas).
Por tanto, durante estas Navidades, el consumo moderado de cerveza puede convertirse en una opción para las diferentes reuniones que se avecinan y, de esta manera, seguir manteniendo un equilibrio en la dieta, reportando beneficios en nuestra salud y consiguiendo proteger el estilo de vida sano del patrón mediterráneo.
Foro para la Investigación de la Cerveza y Estilos de Vida
El Foro para la Investigación de la Cerveza y Estilos de Vida (FICYE) es una entidad que pretende ahondar en el conocimiento de la cerveza, impulsando y compartiendo la investigación científica sobre el producto, su consumo moderado y su relación con el estilo de vida; recordando siempre que el consumo abusivo de alcohol es perjudicial y, por lo tanto, no tiene cabida en un estilo de vida saludable. Para más información, consultar nuestra web: http://www.ficye.es
Para más información:
Manuel Lozano Castillo / Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Tel: +34 913 84 67
[1] Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).
[2] Ramu A, Neild P. Diet, and nutrition. In: Naish J, Syndercombe Court D, eds. Medical Sciences. 3rd ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2019: chap 16.
[3] Forma parte de la Pirámide de Alimentación Saludable de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria –SENC- y de la pirámide de la Dieta Mediterránea de la Fundación Dieta Mediterránea.
[4] Lu B, Solomon DH, Costenbader KH, Karlson EW. Alcohol consumption and risk of incident rheumatoidarthritis in women: A prospective study. Arthritis Rheumatol. 2014 Apr 11. doi: 10.1002/art.38634
[5] Albrand G, Munoz F, Sornay-Rendu E, DuBoeuf F, Delmas PD. Independent predictors of allosteoporosis-related fractures in healthy postmenopausal women. Bone. 2003; 32(1):78-85.
[6] Mayer Jr O, Simon J, Rosovola H. A population study of the influence of beer consumption on folateand homocysteine concentrations. European Journal of Clinical Nutrition. 2001; 55(7):605-9.
[7] Bohr G., Gerhäuser C., Knauft J., Becker H. Acylphloroglucinol Derivatives from Hops as Anti-inflamatory Agents. Beer in Health and Disease Prevention. 2009; 76: 753.
[8] Se entiende por consumo moderado de cerveza entre los 400-600 ml/día en varones y entre 200-300 ml/día en mujeres.