- La mayoría de los laboratorios de microbiología de nuestros hospitales
están realizando, en estos últimos días, miles de pruebas diagnósticas para
COVID19, lo que ha conducido a una situación crítica y en algún caso se
vislumbra una posible escasez de material. - La SEIMC resalta que el conocimiento adquirido debe servir para que se
considere indispensable el asesoramiento del Microbiólogo Clínico en el
diseño de estrategias de intervención en futuras situaciones similares,
para evitar futuros posibles errores en la gestión de la crisis sanitaria.
Madrid, 23 de diciembre de 2021- Las comunidades autónomas notificaron ayer al Ministerio de Sanidad más de 60.000 nuevos casos de COVID-19, 37.609 de ellos diagnosticados sólo en las últimas 24 horas. La magnitud de estas cifras está suponiendo una situación de colapso en los servicios de microbiología de la mayor parte de hospitales. Ante esta situación, la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) ha querido manifestar su apoyo público al extraordinario esfuerzo y trabajo de los microbiólogos, cuyo rol está siendo clave en esta crisis sanitaria.
Federico García, microbiólogo y vicepresidente de la SEIMC, explica que, precisamente, durante la pandemia de la COVID-19 “se ha puesto el foco en la microbiología clínica, que está proporcionando información clave a distintos niveles: para cada persona concreta, para su entorno familiar y social y para la mejor toma de decisiones de salud pública”. Así, los microbiólogos clínicos han asumido la inmediata y continua puesta al día de conocimientos, así como la adecuada gestión de los recursos de diagnóstico molecular, afrontando en algunos momentos las limitaciones en la disponibilidad de estos.
El vicepresidente de SEIMC explica que la mayoría de los laboratorios de microbiología de nuestros hospitales están realizando, en estos últimos días, miles de pruebas diagnósticas para COVID19, lo que ha conducido a una situación de colapso y en algún caso incluso se vislumbra una posible escasez de material. Por ello, desde SEIMC se ha querido hacer un recordatorio de que el diagnóstico de la COVID19, así como de cualquier otra enfermedad infecciosa, debe basarse siempre en criterios clínicos y epidemiológicos.
Por este motivo, el Dr. García reconoce que “el conocimiento adquirido debe servir para que se considere indispensable el asesoramiento del Microbiólogo Clínico en el diseño de estrategias de intervención en futuras situaciones similares, para evitar posibles errores en la gestión de la crisis”. El microbiólogo clínico también asesora y ofrece apoyo a diario a otros especialistas, en cuanto a las posibilidades diagnósticas y de cribado, además de la gestión de la preanalítica y la gestión de la información obtenida.
Así, con el objetivo de dar respuesta a esta demanda creciente, es clave disponer de los recursos materiales necesarios y del personal suficiente y adecuadamente formado. Para ello, los servicios de microbiología deben mantener una atención continuada (24x7). “Las infecciones graves no tienen horario: los servicios de microbiología clínica de nuestros hospitales no se pueden parar”, concluye el vicepresidente de SEIMC.
