- La compañía con sede en Barcelona obtiene la distinción que la acredita como empresa cuyo propósito es generar un impacto positivo en la sociedad y que cumple con los más exigentes estándares sociales, ambientales y comunitarios
- Ferrer ha alcanzado una puntuación de 100,6 puntos y entra a formar parte del reducido 25% de empresas B Corp que han superado los 100 puntos en todo el mundo
- Ferrer ha sido reconocida como empresa B Corp a nivel global, ya que se han tenido en cuenta las prácticas y el modelo de negocio de impacto de todos los territorios en los que tiene presencia directa
Barcelona, 26 de enero de 2022.- Ferrer, laboratorio farmacéutico internacional con sede en Barcelona, se ha convertido en empresa B Corp gracias a su impacto positivo en la sociedad y el planeta. La compañía ha superado el estándar B Corp a nivel global por su cumplimiento con los más altos estándares en términos de desempeño social y ambiental, transparencia y responsabilidad empresarial en todos los territorios donde tiene presencia directa. Al haber superado el proceso de certificación, Ferrer es la primera compañía farmacéutica española que forma parte de la comunidad internacional B Corp, la agrupación de empresas orientadas a construir una economía más inclusiva y sostenible.
Mario Rovirosa, CEO de Ferrer, ha mostrado su satisfacción por la entrada en B Corp y ha explicado que “ser una empresa B Corp es la culminación de un proceso que empezó hace muchos años, cuando el Presidente y propietario de Ferrer, Sergi Ferrer-Salat, sentó las bases de cómo quería que fuera la compañía. Esa visión se ha intensificado en los últimos cuatro años con la definitiva transformación en una organización de impacto positivo. Toda nuestra estrategia gira alrededor de las personas y del desarrollo de su talento, la protección del planeta y la lucha por tener una sociedad más justa y equitativa. Este reconocimiento es solo el principio y nuestro compromiso es seguir trabajando para continuar generando un impacto positivo en la sociedad”.
Pablo Sánchez, director ejecutivo de B Lab Spain -organización encargada de la evaluación de las empresas candidatas a B Corp-, también ha destacado: “Estamos encantados de dar la bienvenida a Ferrer a la comunidad B Corp. Esta comunidad trabaja para reducir la desigualdad, respetar y regenerar el medio ambiente, fortalecer las comunidades y crear empleos de alta calidad con dignidad y propósito. Ferrer es un nuevo miembro de la comunidad B Corp, que demuestra con su ejemplo cómo se pueden alcanzar estos resultados”.
Ferrer ha entrado a formar parte del movimiento B Corp tras haber sumado 100,6 puntos en el proceso de certificación, formando parte del reducido 25% de las más de 4.500 empresas del movimiento B Corp a escala global que han obtenido más de 100 puntos.
Más de 50 proyectos transversales a nivel global
Para otorgar la distinción B Corp, la organización sin ánimo de lucro, B Lab Spain, efectúa un riguroso proceso de certificación a través del cual las empresas deben proporcionar evidencia de sus buenas prácticas.
En el caso de Ferrer, se han evaluado diferentes sociedades de la organización, con presencia en 15 países (España, Portugal, Alemania, Austria, Grecia, Kazajistán, EE.UU., México, Chile, Perú, Costa Rica, Guatemala, Colombia, Uruguay y Argentina). El proceso ha durado 2 años y ha ayudado a transformar la compañía por completo, a través de la implementación de más de 50 proyectos transversales a nivel global. Este compromiso responde a la estrategia corporativa recientemente adoptada por Ferrer, fundamentada sobre tres pilares: Great People, a través del cual Ferrer promueve una cultura centrada en las personas, basada en la confianza y en la responsabilidad, en la que el talento prospera; Liveable Planet, con el que la compañía fomenta la protección del medioambiente por el bien de todos; y Social Justice, mediante el que Ferrer apoya a personas en situación de vulnerabilidad para contribuir a una sociedad más justa y equitativa y asegurar la igualdad de oportunidades.
Entre los proyectos llevados a cabo, B Corp ha valorado muy positivamente la implementación de una estrategia global para desarrollar soluciones terapéuticas innovadoras capaces de transformar la vida de los pacientes que padecen enfermedades graves y debilitantes. Además, se ha reconocido la capacidad de operar con los más altos estándares de calidad y seguridad, transparencia, ética y honestidad con, por ejemplo, la modificación de los estatutos sociales para asegurar que la toma de decisiones tenga en cuenta el impacto social y medioambiental o la elaboración de un código ético interno y de terceros.
En el ámbito de personas han destacado programas de desarrollo del talento, autoliderazgo y gestión de equipos, feedback continuo, entre otros. Por otro lado, en el ámbito social y ambiental, se han valorado iniciativas como la celebración de las primeras jornadas de voluntariado corporativo, la donación del 50% de los beneficios netos obtenidos en los últimos dos años a diferentes proyectos sociales a través de las Fundaciones, el lanzamiento de una Política de Compras Sostenibles, la definición de la Estrategia Climática 2030 para reducir las emisiones en un 46% y el diseño de un modelo de packaging sostenible para mitigar el impacto ambiental de los productos.
Nuevos estándares para la industria farmacéutica
Además de lograr convertirse en B Corp, Ferrer también ha participado en la definición de los estándares para la industria farmacéutica.
A la hora de desarrollar los requisitos de certificación y posicionarse en determinados asuntos controvertidos, B Lab requiere una investigación significativa y apoyo de los grupos involucrados en un determinado sector. Una vez creados los nuevos estándares, los revisan y los votan los miembros del Consejo Asesor de Normas de B Lab, un grupo independiente y diverso de expertos en negocios responsables y sostenibles de todo el mundo.
Redefinir el éxito empresarial
Con este proceso, Ferrer se suma a una comunidad de más de 4.500 empresas en todo el mundo que están contribuyendo a redefinir el sentido del éxito empresarial: un éxito que se mide no sólo por los beneficios económicos, sino también por el bienestar de las personas, las comunidades y el planeta, y con ello lograr que todas las compañías compitan por ser, no sólo las mejores del mundo sino, sobre todo, las mejores para el mundo.