El Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid acoge el congreso EORTC CLTG
- Según el Dr. Ortiz“sabemos desde hace años que la Micosis Fungoide (MF) y el Síndrome de Sézary (SS) son muy dependientes del microambiente tumoral, quizá más que lo que les ocurre a otros tumores. Cada vez conocemos más de la influencia de ciertos tipos de linfocitos B, macrófagos, fibroblastos y linfocitos T reguladores en la patogenia de estos LCCT[i]. Lo importante es que, además, tiene impacto en la evolución”.
- “Mogamulizumab es un anticuerpo monoclonal dirigido contra el CCR4, una diana terapéutica que se expresa más en las células de la MF y el SS, que en los linfocitos T normales, así que su impacto es mucho mayor sobre las células malignas, reduciendo el daño que sufren los linfocitos T no patológicos”, explica el experto.
- El Congreso EORTC - Cutaneous Lymphoma Tumours Group reunirá a más de 300 expertos a nivel nacional e internacionalcon el objetivo de poner en común nuevas investigaciones, y compartir conocimientos y experiencias.
- Los LCCT son una forma rara, en ocasiones grave y potencialmente mortal de linfomas no Hodgkin[ii],[iii]. Se caracterizan por la acumulación de linfocitos T malignos en la piel que se manifiestan clínicamente como manchas, placas o tumores[iv]. Pueden llegar a tener un profundo impacto en la calidad de vida relacionada con la salud y el bienestar psicológico[v].
Madrid, 21 de septiembre de 2022.- En el marco del Congreso EORTC - Cutaneous Lymphoma Tumours Group, que este año se celebra en el Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid del 22 al 24 de septiembre, el Dr. Pablo Ortiz Romero, jefe del Servicio de Dermatología en el Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid explica que “sabemos desde hace años que la Micosis Fungoide (MF) y el Síndrome de Sézary (SS) son muy dependientes del microambiente tumoral, quizá más que lo que les ocurre a otros tumores. Cada vez conocemos más de la influencia de ciertos tipos de linfocitos B, macrófagos, fibroblastos y linfocitos T reguladores en la patogenia de estos LCCT1. Lo importante es que, además, tiene impacto en la evolución”.
Este será el eje central del simposio “How does targeted therapy affect immune dysfunction in mycosis fungoides and Sézary syndrome?”, organizado por Kyowa Kirin durante este congreso. “Se trata de un simposio con un programa muy interesante. Hablaremos del papel del microambiente en la Micosis Fungoide y el Síndrome de Sézary, del impacto del mogamulizumab en ese microambiente y de los exantemas inducidos por mogamulizumab, que están muy relacionados con el cambio en el microambiente. Hay datos que apuntan que la aparición de este exantema podría estar relacionada con una mejor evolución de los pacientes[vi]”, comenta el Dr. Ortiz. Los profesionales médicos que quieran acceder al contenido de este programa podrán hacerlo en (https://www.kyowakirinhub.com/es-es/areas-terapeuticas/oncologia/lcct/eventos-y-congresos).
Este congreso internacional supone un punto de encuentro de más de 350 médicos (dermatólogos internacionales, científicos, epidemiólogos, hematólogos, inmunólogos, oncólogos, patólogos, oncólogos radioterápicos y psicólogos) con el objetivo de poner en común nuevas investigaciones, y compartir conocimientos y experiencias. Además, durante el mismo se analizarán nuevos horizontes desde una perspectiva internacional para el abordaje de los linfomas cutáneos.
Efecto de mogamulizumab sobre el microambiente tumoral y la inmunidad antitumoral de los pacientes con MF y SS
El receptor CCR4 ha sido identificado como uno de los principales responsables de la infiltración de los clones malignos de células T a nivel cutáneo[vii]. Basado en este principio, en la actualidad existen nuevas terapias, como mogamulizumab, que se une al receptor CCR4 expresado en la superficie de las células malignas y hace que estas sean reconocidas por las células efectoras de la inmunidad, que liberan enzimas tóxicas que destruyen las células malignas[viii]. “Mogamulizumab es un anticuerpo monoclonal dirigido contra el CCR4, una diana terapéutica que se expresa más en las células de la MF y el SS, que en los linfocitos T normales, así que su impacto es mucho mayor sobre las células malignas, reduciendo el daño que sufren los linfocitos T no patológicos”, comenta el Dr. Ortiz.
“Mogamulizumab produce en la mayoría de los pacientes una bajada muy rápida de los linfocitos malignos en sangre periférica. Junto a ello, se produce una modificación también rápida y mantenida de poblaciones linfocitarias normales. Ello desencadena una reducción de los linfocitos T CD4+ exhaustos, que son incapaces de reaccionar adecuadamente, de realizar su trabajo inmune[ix]. A la vez se da un aumento de linfocitos T operativos, con plenas capacidades”, añade el Dr. Ortiz.
Por otra parte, durante el simposio se abordarán los exantemas inducidos por mogamulizumab, “que ocurren con mucha frecuencia. Muchos profesionales tienen problemas para diferenciarlos de una progresión de la enfermedad, cuando en realidad el paciente se está beneficiando del tratamiento. En el simposio se dan claves muy prácticas para su reconocimiento y manejo”, concluye el experto.
Sobre los LCCT
Los linfomas cutáneos de células T (LCCT) son una forma rara, en ocasiones grave y potencialmente mortal de linfomas no Hodgkin1,2. Su diagnóstico en estadios iniciales es difícil por la presencia de múltiples manifestaciones clínicas3 y pueden llegar a tener un profundo impacto en la calidad de vida relacionada con la salud y el bienestar psicológico4, ya que las alteraciones en la piel y el picor provocan depresión, trastorno en el sueño y fatiga[x].
Los LCCT representan alrededor del 4% de todos los casos de linfomas no Hodgkin1 y hasta el 80% de todos los linfomas cutáneos primarios7. Afectan a cerca de 240 personas por cada millón en Europa7.
Sobre Kyowa Kirin
Kyowa Kirin se esfuerza por desarrollar y ofrecer medicamentos innovadores con el propósito de cambiar vidas. Como compañía global de especialidades farmacéuticas con sede en Japón y con una trayectoria de más de 70 años, aplicamos tecnologías de vanguardia, incluida nuestra experiencia en investigación e ingeniería de anticuerpos monoclonales, para poder dar solución a las necesidades de los pacientes y la sociedad en múltiples áreas terapéuticas tales como Nefrología, Oncología, Inmunología / Alergología y Neurología. En nuestras cuatro divisiones regionales: Japón, Asia Pacífico, América del Norte y EMEA / Internacional, nos focalizamos en nuestro propósito de hacer sonreír a las personas, y compartimos nuestros valores de compromiso con la vida, trabajo en equipo, innovación e integridad. Puede obtener más información sobre Kyowa Kirin en: https://www.kyowakirin.com
[i] Liu Z, Wu X, Hwang ST, Liu J. The Role of Tumor Microenvironment in Mycosis Fungoides and Sézary Syndrome. Ann Dermatol. 2021;33(6):487.
[ii] Scarisbrick JJ, et al. J Clin Oncol. 2015;33(32):3766–3773.
[iii] National Organization for Rare Disorders: Cutaneous T-Cell Lymphomas. https://rarediseases.org/ rarediseases/cutaneous-t-cell-lymphomas. Accessed: June 2020.
[iv] NORD, Rare Disease Database - Cutaneous T-Cell Lymphomas, 2018(1).
[v] Sampogna F, et al. British Journal of Dermatology 2009 160, pp815–822 Cutaneous lymphomas may have a profound impact on patients’ health-related quality of life (HRQoL) and psychological well-being.
[vi] Blanchard G, Guenova E. Mogamulizumab‐associated rash (MAR) mars its efficacy in the treatment of cutaneous lymphoma. Br J Dermatol. 2022 Jan;186(1):15–6.
[vii] Duvic M, Evans M, Wang C. Mogamulizumab for the treatment of cutaneous T-cell lymphoma: recent advances and clinical potential. Ther Adv Hematol. Jun 2016;7(3):171–4.
[viii] Yoshimitsu M, Arima N. Mogamulizumab for the treatment of adult T-cell leukemia/lymphoma. Blood Lymphat Cancer Targets Ther. 18 Dec 2014;5:17.
[ix] Cowan RA, Scarisbrick JJ, Zinzani PL, Nicolay JP, Sokol L, Pinter‐Brown L, et al. Efficacy and safety of mogamulizumab by patient baseline blood tumour burden: a post hoc analysis of the MAVORIC trial. J Eur Acad Dermatol Venereol. 2021 Nov;35(11):2225–38.
[x] Vij A, Duvic M. Prevalence and severity of pruritus in cutaneous T cell lymphoma. Int J Dermatol. Aug 2012;51(8):930–4.