El Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital de Mataró inició este tipo de intervenciones ahora hace un año, y es uno de los pocos centros catalanes donde se realizan. Se trata de la técnica V-Notes (Vaginal Nature OrificeTransluminalEndoscopicSurgery), un método que combina la cirugía vaginal con la laparoscópica, haciéndola todavía menos invasiva, y que permite que las pacientes no tengan cicatrices visibles, puesto que no se hace ningún corte en el abdomen y las únicas incisiones que se realizan son en el interior de la vagina. Los principales beneficios son una recuperación postoperatoria más rápida y con menos dolor, así como la disminución de posibles complicaciones como infecciones y adherencias.
Pau Carabias, jefe del Servicio de Obstetricia y Ginecología, destaca que se trata de una técnica que “ha revolucionado la cirugía ginecológica, puesto que permite que una intervención como la histerectomía, que supone la extirpación del útero y que es una de las intervenciones ginecológicas más frecuentes, pueda pasar a ser una cirugía ambulatoria”. Además, añade que “es una técnica que brinda a los profesionales una mejor visión de los tejidos y un mejor control y precisión, evitando lesiones en órganos próximos al útero y menos sangrado de la paciente”.
En el último año, en el Hospital de Mataró se han realizado 22 cirugías de este tipo y las indicaciones más habituales son los miomas uterinos, la hiperplasia endometrial, los quistes ováricos o el cáncer ginecológico inicial.
Centro formador. La cirugía laparoscópica vaginal requiere una serie de habilidades y de técnicas especiales y los ginecólogos se tienen que formar específicamente para poder hacer este tipo de intervenciones. El pasado mes de mayo, el Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital de Mataró organizó un curso sobre “Cirugía Ginecológica Laparoscópica Avance” donde se combinaba una sesión teórica con el entrenamiento práctico en quirófano, con la realización de dos histerectomías laparoscópicas vía vaginal. Asistieron, entre otros, ginecólogos del Hospital de Calella y del Hospital de Viladecans.
