- Los probióticos son según la OMS “microorganismos vivos que, cuando son administrados en cantidad adecuada, confieren un efecto beneficioso sobre la salud del huésped”.
- En el caso de diarrea aguda, los probióticos han demostrado su capacidad de reducir significativamente la gravedad y/o duración de los episodios.
- La administración de antibióticos provoca en muchos casos diarrea, tanto en adultos como en niños.
- El LGG es la mejor opción, tanto en eficacia como en tolerabilidad, frente a otros probióticos para prevenir la diarrea asociada a antibióticos.
Madrid, 13 de noviembre de 2018 – El probiótico LGG, el más estudiado del mundo(1) , que ha demostrado ser eficaz frente a agentes externos como antibióticos, rotavirus o bacterias que alteran la flora intestinal llegando a provocar diarrea, está especialmente indicado en las épocas en las que los médicos aumentan la prescripcioón de antibióticos, y con ello la probabilidad de sufrir diarreas.
El LGG actúa a nivel del tubo digestivo estabilizando la composición de la microbiota intestinal, la conocida como flora bacteriana o intestinal, aumentando la resistencia del organismo frente a patógenos. Por esto tiene efectos beneficiosos para la prevención o tratamiento de la diarrea.(2)
Los probióticos son, según la OMS, “microorganismos vivos que cuando son administrados en cantidad adecuada confieren un efecto beneficioso sobre la salud del huésped”. Las bacterias probióticas favorecen el aumento de bacterias beneficiosas y disminuyen la población de microorganismos potencialmente patógenos.
La administración de antibióticos provoca en muchos casos diarrea, tanto en adultos como en niños; según un estudio publicado en The Journal of Pediatrics “hasta un 40% de niños con tratamiento antibiótico sufren diarrea” (3) y y, su incidencia varía en función del tipo de antibiótico administrado: prevenir sus efectos simultaneando la ingesta de probióticos tras la prescripción de antibióticos, ayuda a evitarla.
Según diversos estudios clínicos, la concentración de probióticos es importante. En el caso concreto de LGG, se ha demostrado que debe ser de > 1010 UFC (Unidades Formadoras de Colonias) para la diarrea aguda y la diarrea asociada a antibióticos.
En el caso de diarrea aguda, normalmente se recurre a rehidratación con sueros salinos, pero estos no reducen ni la gravedad ni la duración de los episodios, los probióticos sí han demostrado su capacidad de reducir ambos significativamente.
Ferring ofrece varias presentaciones de Lactobacilus GG en sobres y gotas, especialmente indicados para niños. Recientemente ha ampliado su oferta con comprimidos masticables de ingesta más fácil por parte de los adultos.
BIBLIOGRAFÍA
1. Cai et al. comparative efficacy and tolerability of probiotic for antibiotic-associated diarrhea: systematic review with network meta-analysis. UEG journal 2018;6(2):169-180
2. Guías prácticas de la WGO (World Gastroenterology Organisation) Probióticos y prebióticos 2008
3. Guarino A et al. ESPGHAN Evidence-based Guidelines for the Management of Acute Gastroenteritis in Children in Europe: Update. J Pediatr Gastroenterol Nutr. 2014 Jul;59(1):132-52