- Un Manifiesto impulsado por FEDE, apoyado por siete colectivos clave en el ámbito de la diabetes, urge a las autoridades para que la evidencia científica prime sobre los criterios económicos en su fijación
- Esta traba, que sólo sigue vigente en España a nivel europeo, afecta a más de 250.000 personas y demuestra que se antepone el control del gasto a las consecuencias en resultados en salud
Madrid, 5 de octubre 2020. Una iniciativa de la Federación Española de Diabetes (FEDE), que ha contado con la colaboración de siete sociedades científicas clave en el ámbito de la diabetes, han consensuado un Manifiesto en el que reclaman la necesidad de que se revisen, de forma urgente, los visados de fármacos indicados para la diabetes. El contexto actual de pandemia ya ha supuesto la eliminación temporal de estos visados en muchas Comunidades Autónomas, lo que ha puesto de manifiesto que su eliminación temporal no significa ningún riesgo para los pacientes.
El documento, elaborado por FEDE y apoyado por la Sociedad Española de Diabetes (SED); la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN); la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFYC); la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN); la Sociedad Española Médicos Generales y de Familia (SEMG); la Sociedad Española Cardiología (SEC), y la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), destaca que el actual marco normativo, vigente desde el año 2007, está suponiendo una limitación en el acceso a los medicamentos de las personas con una enfermedad crónica como la diabetes (13,8% de la población adulta).
En este sentido, exponen que, en el origen de estos visados, esta medida favorecía la seguridad del paciente, pero a día de hoy, “carece de fundamento y responde, en algunas ocasiones, a un control del gasto”. Además, el Manifiesto solicita a las autoridades competentes la revisión de los criterios que rigen el establecimiento de los visados para fármacos antidiabéticos, para que en el futuro se ajusten a la evidencia científica y a las recomendaciones de guías clínicas nacionales e internacionales.
“Después de más de una década, lo que se ha puesto de manifiesto es que, lejos de conseguir su objetivo, lo único que está logrando es limitar el acceso a los tratamientos innovadores que pueden tener actualmente las personas con diabetes y, en este sentido, contribuir a una mayor calidad de vida”, explica Aureliano Ruiz, presidente en funciones de FEDE.
Concretamente, esta barrera afecta, en España y de manera directa, a más de 250.000 personas. Para FEDE esto es algo inadmisible, ya que está afectando negativamente, tanto a la salud del colectivo al que representa, como a la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS). Por un lado, contribuye a que la diabetes esté peor controlada y derive en múltiples complicaciones y, por otro, incremente el gasto sanitario, tanto directa como indirectamente.
Criterios económicos
Los clínicos y médicos firmantes del manifiesto resaltan que, en muchos casos, las personas afectadas finalmente no consiguen la aceptación del visado, motivado porque, a pesar de contar con la adecuada prescripción médica, se anteponen los criterios económicos a los clínicos con sus consecuencias en resultados en salud. Si el objetivo del visado fuera controlar la adecuación de la prescripción a la indicación, destacan que, a día de hoy, los sistemas de receta electrónica ya permiten establecer mecanismos de control y auditorías suficientes para reducir o eliminar la necesidad de los visados.
Esta traba genera una discriminación así como una inequidad en el acceso, ya que las CC AA tienen la competencia en su articulación práctica. La Comisión Europea ya envió una carta de emplazamiento al Gobierno español por considerar injustificadas las condiciones de reembolso por visado de inspección de ciertos medicamentos, tales como tratamientos contra la diabetes, ya que considera que este procedimiento no se basa en criterios objetivos. De hecho, España es el único país europeo que mantiene vigentes estos visados.
Más aún en un contexto de elevada sobrecarga asistencial, que probablemente empeorará los próximos meses, el visado supone una traba adicional, especialmente por la dificultad técnica que, en ocasiones, requiere completar adecuadamente el proceso. Esta situación genera una clara discriminación debido a la imposición de trabas al acceso al tratamiento adecuado para su patología, no estando en ningún momento justificadas, al afectar a su salud a corto, medio y largo plazo.
Por todo ello, este manifiesto urge a las autoridades competentes a la revisión de los criterios que rigen el establecimiento de estos visados para fármacos antidiabéticos, para que la evidencia científica sea la que anteponga a criterios económicos, para evitar consecuencias en resultados en salud, y se retiren aquellos que no se ajusten a la legalidad.